¿Porque algunas marcas, siendo buenas tienen tan mala reputación? Y por el contrario, algunas muy malas tienen un branding maravilloso. ¡Que alguien me explique!

Tranquilización (como decía Sky hace 200 millones de años), estuve analizando marcas, incluyendo personas y hasta políticos, creo que llegué a una conclusión, se los explicaré en breves 3 pasos y un ejemplo y medio. Empecemos.

1.-El producto. Hemos hablado cantidad de veces de la calidad del producto, que ya no es una gracia, es una obligación que éste satisfaga exitosamente los deseos del consumidor. Pero ¿que pasa cuando el producto es una persona? Exactamente lo mismo, si una persona no aporta valor, no es congruente con sus actos y sus palabras, entonces se considera mala calidad de producto, vaya, no cumple (está defectuoso) ¿les suena? sin raspar muebles por favor, que este artículo no es para criticar a nadie.

2.-El empaque. Todo elemento comunica, hay productos excelentes con un pésimo empaque y esto afecta al momento de la decisión de compra. Si ya saben que voy a hacer la comparación ¿que pasa con el empaque de una persona?, cierren los ojos, imagínense (ábranlos), ok, imagínense que van a volar 12 horas rumbo a las vacaciones de su vida, estás de lo mas feliz y relajado y en eso anuncian al piloto, lo ves… bermudas tipo cargo, camiseta Hanes (no tengo nada en contra de la marca, es solo ilustrativo) con hoyos, se asoman ligeros destellos de mostaza untados estratégicamente en el pecho, uñitas de gavilán con su respectivo toque negro ¿sigo? ¿o ya los llevé al punto? bien, aclarado el punto dos, continuemos el despliegue de sabiduría en este análisis intelectual.

3.-La comunicación. Ser o no ser bueno, parecer o no parecer bueno, esa es la cuestión; con una buena estrategia de mercadotecnia siempre tendrás una primera oportunidad de oro, no dos, porque si no validas tu calidad estás frito, obvio el presupuesto puede alargar o acortar tu oportunidad, pero al final tendrás que demostrar que tienes con que respaldar lo que estás diciendo, pero ¿que estás diciendo?, aquí hacemos una pausa reflexiva.

QUE ESTAS DICIENDO.

Un ejemplo: ¿Porque el Presidente de la República tiene serios problemas de percepción de marca? Ojo, no sean intensos, este artículo no es político ¿ya se tranquilizaron? ok, sigamos hablando de mercadotecnia. No conozco al equipo del área de comunicación de la presidencia, tampoco conozco su estrategia lo que estoy analizando son los resultados: desastrosos.

• Leo críticas sobre su nivel intelectual, pero ¿es Presidente, no? algo de inteligencia debe de tener.
• Leo críticas sobre su trabajo, sin embargo creo que la mayoría desconoce el trabajo bueno que está haciendo, algo debe de estar haciendo bien, que nadie lo perciba es otra cosa, insisto, desconozco, solo leo y leo gente quejándose la mayoría sin saber.
• Leo críticas sobre su físico ¿guapo? ¿delgado? ¿demacrado? ¿bataxxxx?, al final creo que lo menos importante es el físico, sin embargo de eso si se habla.
• Leo críticas sobres sus hijos, no los defiendo y que quede claro, pero yo también tengo hijos y bastante imprudentitos.
• Leo críticas sobre sus casas ¿en serio? Para mi no es sorpresa las mansiones de los políticos ¿está bien? ¿está mal? No tengo la suficiente información para emitir una opinión, puedo si, todos somos libres de expresarnos (menos la Aristegui).

Y así, leo y leo, desde el punto de vista ciudadano agraviado tendría el hígado retorcido, pero lo estoy analizando -vuelvo y repito- desde el lado de la mercadotecnia. No veo ni una sola estrategia de contención de crisis, no lo veo. Alguien hoy me dijo acertadamente “está como en arena movediza, si se mueve se hunde mas” he aquí la cuestión: ¿Dónde están los expertos en mercadotecnia?, yo les voy a decir donde: trabajando para Coca-cola.

Medio ejemplo: ¿es buen producto Coca-cola? y ¿que tal la percepción de marca?, avisé que era medio ejemplo porque se que saben a que me refiero.

Mi conclusión.

Todos los que nos dedicamos a la mercadotecnia caemos en el pozo de los incomprendidos, la mayoría de las personas no saben para que sirve nuestro trabajo, lo que si saben es que gastamos lo que el departamento de ventas se gana con el sudor de su frente. Nadie necesita lo que no conoce, por lo tanto si no saben a ciencia cierta para que sirve entonces no le dan importancia; es ahí donde mandan llamar al hijo del compadre, al que “le sabe mover a la computadora”, al que puso una agencia solo porque el sobrino estudió diseño gráfico y peor aún, cuando se quedan con el publicista de hace 20 años que no tuvo la delicadeza de avisarles que hay nuevos medios de comunicación, por ejemplo: el internet.

Lo siento, lo tenía que escribir, no hay otra explicación para la falta de estrategia que veo en marcas, en personas y en políticos (los separé por la época electoral, no se azoten).

Es increíble como en plena época electoral sigan sin darle importancia a la comunicación, no se necesita tener la lista de colaboradores en el área para saber que los resultados, en el mejor de los casos es nulo, en el peor pareciera que son sus enemigos.

Mi consejo

Contraten profesionales y apliquen el “no me ayudes compadre”.

«Se que a mi si me aplauden», ¡bueno me conformo con que lo compartan!

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